En Gerli, dos pibes armados se metieron a una barbería, se llevaron pertenencias del local y hasta el auto que estaba en la puerta. Pensaron que la jugada les había salido redonda, pero la película terminó con tijera en mano: la policía los fue a buscar y les hizo “pelo y barba” (Cayeron adentro).

Tras la investigación, la comisaría Avellaneda Sexta metió tres allanamientos con apoyo de otras dependencias. En uno de los operativos cayó Kevin Darío Díaz (23), a quien le encontraron la ropa usada en el robo, un morral con nombre sugestivo (Vete al Diablo), perfumes ajenos y un combo de municiones de varios calibres.

Otros dos domicilios dieron negativo, pero el golpe principal estaba dado: detenido y pruebas recuperadas. El auto robado, un Citroën C4 gris, también había sido encontrado a las pocas horas del asalto, lo que ayudó a encaminar la investigación.

Según fuentes policiales, las cámaras privadas y municipales fueron clave para identificar al sospechoso y seguir su rastro hasta la casa donde finalmente lo atraparon. El operativo incluyó a efectivos de todas las comisarías de Avellaneda y de la UPPL, en un despliegue coordinado para no dejar flecos sueltos.

La fiscal avaló lo actuado y el joven quedó a disposición de la Justicia por robo agravado con arma de fuego y robo automotor.

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