En Avellaneda no todo es cuento: anoche una mujer policía demostró, sin discursos ni placas oficiales, lo que significa ponerse la camiseta de verdad. La Sargento Leticia Medina, del Comando Patrullas Avellaneda, se enfrentó a tiros contra tres delincuentes que venían de robar un Fiat Cronos recién sustraído en la zona del Shopping Alto Avellaneda.
Los ladrones —que venían haciendo desastre desde Güemes y Laralde— fueron detectados por las cámaras del Centro de Monitoreo. Con varios móviles atrás, al llegar a Salta y Pringles se dan de frente contra un poste de luz. En vez de rendirse, salieron corriendo y abrieron fuego. Y ahí Medina, sin dudar medio segundo, se plantó.

En pleno tiroteo recibió un disparo en la axila derecha que le perforó un pulmón. Sus compañeros la subieron al móvil y la llevaron de urgencia al Hospital de Lanús, donde fue operada y sigue en terapia intensiva, estable pero con pronóstico reservado. Una verdadera leona del uniforme.
Los delincuentes no corrieron con tanta suerte:
- Fernández Emanuel Javier, 19 años, terminó con un tiro en el omóplato.
- Mosquera Dante Tomás, 17 años, recibió un disparo en la pierna derecha cerca de la rodilla.
Ambos quedaron internados en el Eva Perón de Lanús, estables y con custodia. - El tercero, Duarte Flores, argentino, 19 años, fue reducido en el lugar sin heridas.
El auto robado, un Fiat Cronos AG-295-RT, quedó secuestrado. La causa quedó caratulada como Robo calificado por empleo de arma en concurso real con tentativa de homicidio agravado por ser la víctima personal policial.
Intervienen Fiscalía de Menores Nº5 del Dr. Lázari.
Acá no hay relato, no hay verso: si hoy estos tres están tras las rejas es porque una mujer policía no retrocedió ni un paso. Leticia Medina honró el uniforme, el barrio y la profesión. Y todos esperamos verla volver a casa como lo que es: una heroína de carne y hueso.

