La comunidad de Villa Azul, en Avellaneda, sigue padeciendo las consecuencias de las intensas lluvias que azotaron la zona. A pesar de que ha pasado más de una semana desde el temporal, ni el municipio de Avellaneda ni el de Quilmes han brindado asistencia con bombas de achique para drenar el agua acumulada en las viviendas. Tampoco se han realizado obras de infraestructura como canaletas o cañerías que ayuden a prevenir futuras inundaciones.
El drama de la abuela Fleitas
Karina, vecina del barrio, denunció que el intendente Jorge Ferraresi otorgó viviendas a jóvenes solteros que alquilan en otros lugares, mientras que una abuela de apellido Fleitas, quien sufrió un ACV, fue desalojada de su hogar debido a la inundación de su habitación. “Ella soñaba con recibir su vivienda, estaba convencida de que así sería, pero el viernes pasado el intendente entregó las casas a gente de su entorno político” relató Karina, indignada.
Obstáculos para hablar con el intendente
Según la denuncia, cuando los vecinos intentaron dialogar con Ferraresi, Mónica y Chucarro, personas cercanas al oficialismo, impidieron el acceso al intendente. “Nos empujaban, nos bloqueaban el paso, aplaudían como focas para que no lleguemos a él. Son una patota, una fuerza de choque” afirmó Karina.
Además, mencionó que el gobernador Axel Kicillof y la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, prometieron en plena pandemia que ya estaba el dinero para urbanizar la villa. “Todavía lo estamos esperando” expresó con resignación.
La solidaridad entre vecinos
Ante la falta de respuesta oficial, la ayuda sigue viniendo de los propios vecinos y de personas de otras zonas de Avellaneda que se organizan para asistir a los damnificados. “Hoy, después de una semana de lluvias, volvió a llover y se inundó todo otra vez. Es un barrio olvidado” lamentó Karina.
El impacto político en el barrio
Karina también reflexionó sobre el impacto electoral de estas situaciones. “Después se preguntan por qué tenemos el presidente que tenemos, por qué gana Milei en un barrio que supuestamente era peronista. Y van a seguir ganando justamente por esto, porque estafan en la buena voluntad de los vecinos, de la gente que los banca, como esta abuelita. La gente no es tonta” concluyó.
La comunidad de Villa Azul sigue esperando respuestas y soluciones concretas, mientras la indignación crece ante la falta de acción de las autoridades.