El descalabro del partido amarillo en su principal bastión electoral fortalece la posición de los dirigentes que buscan negociar con los libertarios para las elecciones bonaerenses para evitar la profundización de su crisis.
Luego de la derrota histórica del PRO y la sorpresiva victoria de LLA en las elecciones porteñas, cambió la correlación de fuerzas entre una y otra formación política. El mileismo salió fortalecido como principal opción política del voto de derecha, mientras que el macrismo se debilitó y quedó relegado, lo que condiciona fuertemente las negociaciones para constituir una alianza frente a las elecciones en la provincia de Buenos Aires.
En la caída, quedó fortalecida la posición de los dirigentes del partido amarillo que buscan armar una sociedad con La Libertad Avanza, liderados por Cristian Ritondo, Diego Santilli y Guillermo Montenegro. Con la derrota consumada en CABA, creen más necesario que nunca aliarse con el oficialismo nacional en suelo bonaerense para no profundizar la crisis de representatividad que vive el PRO en la zona de mayor caudal electoral del país.
Con Mauricio Macri despejando el camino por no estar en el país debido a una gira por Perú y Medio Oriente, la opción de aliarse con LLA no tendrá una oposición importante salvo la del jefe de Gobierno porteño Jorge Macri, quien estará más ocupado en enfrentar la nueva relación de fuerzas en la Legislatura porteña tras los resultados electorales que deja a su Gobierno en una situación en la que deberá negociar gobernabilidad con los ex aliados del larretismo y la Coalición Cívica.
Sin embargo, más allá de la voluntad por negociar del PRO, esta se verá condicionada por la posición ventajosa de LLA, que buscará que la negociación transcurra bajo los carriles que prefieran. En la noche del domingo, luego del triunfo electoral, desde el oficialismo abrieron las puertas del partido a los dirigentes del PRO que quieran sumarse a la formación libertaria.
Pero en LLA, más allá de su situación privilegiada para negociar cargos con el partido amarillo, tiene lugar una fuerte interna entre quienes quieren ubicar a José Luis Espert como principal candidato a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires, como el mismo presidente Javier Milei, y quienes lo resisten, como la misma hermana del mandatario, la secretaria general de la Presidencia Karina Milei.
De forma paradójica, el partido libertario no tiene muchos nombres para competir en la provincia más allá del economista, quien tampoco mide de forma convincente en las encuestas, y es el partido amarillo el que tiene al cuadro mejor posicionado en los sondeos frente al peronismo: Diego Santilli, uno de los que se sentará a negociar con el Gobierno la sociedad entre LLA y el PRO.