En la zona de quintas, sobre la calle Juan B. Justo y paralelo al arroyo Sarandí, los vecinos y amantes del automovilismo de Avellaneda se han congregado en el Autódromo de Villa Domínico, ahora en el centro de una controversia.
El intendente ha ordenado a sus concejales la rezonificación de la zona, pasando de un canon mensual de 50 mil pesos a una exorbitante suma de 3 millones de pesos. Esta medida ha generado indignación y preocupación en la comunidad, donde algunos denuncian que detrás de la decisión habría un negocio inmobiliario encubierto.
Nuestro medio ha venido siguiendo este tema que inquieta a los vecinos. La desaparición del autodrómo no solo afectaría el acceso a un deporte y una tradición cultural, sino que también podría aumentar los accidentes viales debido a las picadas ilegales en la vía pública.
Cabe destacar que ya hubo una reunión con el intendente Jorge Ferraresi, quien prometió gestionar otro espacio para los aficionados al automovilismo. Sin embargo, pocos creen en sus palabras, ya que el tiempo pasa sin soluciones concretas.
Ante esta situación, luego de varias protestas pacíficas, la paciencia de los vecinos se ha agotado y no se descarta una marcha masiva de autos hacia la casa del intendente, con bloque incluido. Otros opinan movilizarse al Municipio.