Luego de permanecer 38 días internado, el sumo pontífice saludó a sus fieles en un balcón del Hospital Gemelli, y regresó a Santa Marta, donde seguirá su reposo.
Después de una prolongada internación de 38 días, el papa Francisco recibió el alta médica y regresó al Vaticano. Antes de su vuelta a la Santa Sede, saludó desde un balcón del Hospital Gemelli a una multitud de fieles que lo esperaban: “Gracias a todos”, dijo el jefe de la Iglesia Católica, con una voz débil, en señal de agradecimiento por el apoyo recibido durante las jornadas que atravesó.
Si bien fue dado de alta, el pontífice deberá proseguir con su recuperación en su residencia de Santa Marta. Entre otras cuestiones, deberá recuperar el habla, pues los músculos de la garganta se le dañaron como resultado de la neumonía bilateral que tuvo.
De todas maneras, el papa Francisco, dijo unas palabras, aunque de forma débil, ante la multitud agolpada afuera del nosocomio. Además de agradecer a los fieles, tuvo el detalle de identificar a una señora con flores amarillas: “Veo a una señora con las flores amarillas. Muy bien”, expresó.
También en el mismo Vaticano hubo una gran cantidad de personas que vieron en pantallas el momento en el que el pontífice salió en silla de ruedas al balcón del hospital para saludar. Luego de ese instante, Francisco dejó el nosocomio para volver a la Santa Sede.
Allí iniciará la segunda fase de su recuperación, ya que el equipo médico del Vaticano no ve con buenos ojos que siga permaneciendo en Gemelli, más que nada para evitar que se contagie de algún virus intrahospitalario, como suele suceder en cualquier internación prolongada. De todas maneras, fueron los avances en su salud lo que habilitaron que salga de allí y vuelva a su residencia de Santa Marta.
Mientras siga con el reposo, la agenda del papa se verá restringida. No recibirá visitas y se limitará a apariciones por audio y video en actividades oficiales.