Desde el Ejecutivo se justifican en que hay un personal de 612 empleados y un promedio de 16 internados, pero según los trabajadores, que tomaron el hospital en protesta, los internados son 50.
El Gobierno de Javier Milei anunció el cierre del Hospital Nacional de Salud Mental “Laura Bonaparte” bajo la justificación de que tiene una baja productividad y “lo números no dan” para seguir manteniéndolo. En respuesta a la medida, y a modo de protesta, los trabajadores de esta institución pública tomaron sus instalaciones: “Vamos a sostener la permanencia en el edificio hasta que nos digan qué van a hacer. Desconocemos cómo va a continuar la situación” dijo Leonardo Camacho, delegado de ATE en el hospital.
Desde el Ministerio de Salud de la Nación advirtieron que “no hay marcha atrás” con la iniciativa, y alegan que el Laura Bonaparte tiene una plantilla de 612 empleados para atender un promedio de 16 pacientes internados cuando hay camas para unas 50 personas. Admiten que la restructuración no será una tarea sencilla, pero que la demanda está cubierta por otras instituciones. En ese marco, los pacientes que se encuentran internados en este hospital serían derivados a otros establecimientos.
Respecto a la creciente tensión con los trabajadores del nosocomio, desde la cartera de Salud afirmaron que quieren “ser lo más prolijos posibles” y que “todo se desarrolle dialogando”. “No queremos un enfrentamiento con los trabajadores, no buscamos ese tipo de cosas. La idea es resolver esta situación con el diálogo, por eso hay contacto del Ministerio con los gremios de ATE y UPCN. Posiblemente el lunes haya una nueva reunión”, puntualizaron.
No obstante, según lo declarado por el delegado Camacho, el hospital tiene más pacientes internados la situación de incertidumbre afecta su salud: “Tenemos 40 pacientes internados ahora. El hospital está completo de pacientes que están siendo atendidos por la guardia interna. Son números que no sé de dónde los sacan”. A lo que agregó que “hay 1000 pacientes en consultorios externos y eso escala a 2500 o 3000 atenciones mensuales. A eso hay que sumarle las internaciones y todo lo que tiene que ver con problemáticas de salud mental de niñas, niños y adolescentes, que es atención ambulatoria”.
“Todos los pacientes reciben los psicofármacos, que son carísimos, de forma gratuita en el hospital. Es casi una sentencia de muerte en algunos casos”, expresó el sindicalista. Además, detalló que el fin de semana realizarán “varias actividades de índole cultura y formativas” a la espera de “alguna respuesta” del Gobierno, ya que no volvieron a tener contacto con el Ministerio de Salud después de que se conociera la noticia. En ese contexto, el delegado de ATE le envío un mensaje a Milei: “Que se acerque al hospital, que vea lo que hacemos, que conozca la problemática que trabajamos con los pacientes y que no privemos a la sociedad de un derecho más como es el derecho a la salud”.