La práctica post Superclásico se pasó de la mañana a la tarde por el cónclave con la dirigencia. Inicia la semana de cara a la próxima fecha en Córdoba.
Boca Juniors vive las peores horas del año tras el cachetazo del sábado frente a River en la Bombonera. El Consejo de Fútbol y el presidente de la institución, Juan Román Riquelme, entraron en una dicotomía: volver a despedir a un entrenador ante una dura derrota o no.
La incertidumbre es lo que reina en el club en las últimas horas, aunque los hinchas sostienen que esta magra imagen del equipo no es parte del presente y tiene que ver con un arrastre que viene del pasado (el cumpleaños de Benedetto y las eliminaciones con Estudiantes de La Plata y Cruzeiro).
Tras una larga reunión (más de tres horas) entre el Consejo y el técnico, que obligó a pasar la práctica matutina para la tarde después del domingo libre, se decidió que Diego Martínez siga y dirija contra Belgrano de Córdoba el próximo partido.
Sin embargo, la información es que el ciclo de Diego Martínez está terminado y solo seguirá para que su salida no sea por River, además de darle margen a la dirigencia para que comience a buscar un nuevo entrenador.
Lo primero que dijo Martínez en conferencia prensa, luego de la caída en el Superclásico: “Estamos en un punto de dificultad. En la Copa de la Liga, perdimos en semifinales. En Sudamericana fuimos eliminados, estamos lejos del campeonato”.
“Tengo fuerzas. Siempre voy a querer lo mejor para Boca. Estar acá fue lo que busqué toda mi carrera como técnico y tengo fuerza para seguir. Pero también quiero lo mejor para Boca. Todos como parte del club, veremos qué es lo mejor”, enfatizó el Gigolo.