Javier Milei recibió en Casa Rosada a los representantes radicales con los que negoció el apoyo al decreto que rechaza la suba del 8,1% en los salarios del sector pasivo.
En un intento de mostrar fortaleza política el presidente Javier Milei, negoció con diputados de la Unión Cívica Radical (UCR), el apoyo al veto para la ley de movilidad jubilatoria que volverá a ser tratada por el Congreso este miércoles y ante la cual el oficialismo está en clara desventaja parlamentarios.
Quienes participaron de la reunión en Casa Rosada fueron los legisladores: Pablo Cervi (Neuquén), Martín Arjol (Misiones), Luis Picat (Córdoba), Mariano Campero (Tucumán) y José Tournier (Corrientes). El encuentro demuestra la fuerte crisis que atraviesa el bloque radical presidido por Rodrigo de Loredo.
La intención del libertario es romper la posibilidad de que la oposición consiga un tercio de los votos para poder desestimar el decretó a través del cual Milei eliminó la suba del 8,1% en las jubilaciones mínimas a nivel nacional. Lo que representa unos 15 mil pesos extras mensuales en los castigados salarios del sector pasivo.
De lograrse el cometido de Unión por la Patria, junto con la izquierda y algunos radicales, a excepción de los que pactaron con Milei y que fueron de los creadores del proyecto de ley aprobado por ambas cámaras legislativas hace dos semanas atrás. El veto sería inútil y el aumento se materializaría a partir de octubre.
Esto representaría una nueva derrota legislativa para el Gobierno, que viene siendo golpeado en las últimas semanas. Además de la fuerte interna política que mantiene La Libertad Avanza, que terminó con la expulsión de dos legisladores del bloque y con la falta de conducción que existe dentro del oficialismo para alinear a la propia tropa.