El efectivo retirado es uno de los sospechosos y se enfrenta a posibles cargos por sustracción y ocultamiento del menor.
En el marco de la causa por la desaparición de Loan Danilo Peña, la casa de Francisco Amado Méndez, un policía retirado de Corrientes y supuesto informante del excomisario Walter Maciel, fue allanada este sábado por efectivos de la Policía Federal Argentina (PFA). El domicilio, ubicado en la localidad de 9 de Julio, fue inspeccionado con la ayuda de canes especializados en busca de rastros del niño desaparecido hace 37 días.
Francisco Méndez, el octavo detenido en la causa, aún no ha sido indagado por la jueza federal Cristina Pozzer Penzo. Se enfrenta a posibles cargos por sustracción y ocultamiento de Loan, delitos que prevén penas de 5 a 15 años de prisión según el artículo 146 del Código Penal. Su detención se produjo luego de que Laudelina Peña lo implicara en su indagatoria, aunque Méndez ya había sido identificado como un contacto en la agenda del excomisario Maciel, preso por encubrimiento y amenazas en el caso.
Durante su indagatoria, Laudelina Peña señaló que Méndez estaba presente en el lugar donde se encontraron las pisadas de Loan y que “él avisó que encontró esa huella porque estaba revisando el barro”. La tía de Loan también sugirió que Méndez podría haberse llevado al niño. En su declaración, Laudelina mencionó al policía retirado en 32 ocasiones, indicando su posible implicación en el caso.
El día del hallazgo del botín de Loan, el 14 de junio, Maciel tuvo cuatro comunicaciones con Méndez, según documentos de la causa. Estas llamadas ocurrieron entre las 14:15 y las 17:06, coincidiendo con el descubrimiento del rastro del niño.
En su declaración como testigo el 10 de julio, Méndez explicó cómo encontró las huellas de Loan. “Me encuentro con un barro y veo las dos patas sin zapatillas, y entonces pensé: ‘La zapatilla habrá quedado en el barro’”, relató. También describió cómo contactó a Maciel, quien le pidió que no llamara a nadie más: “No llames a nadie, Méndez”. Poco después, cuatro mujeres, entre ellas Laudelina y su hija Macarena, llegaron al lugar gritando: “¿Dónde está la zapatilla de Loan?”.