La víctima, Bastian Escalante Montoya, fue operado en dos ocasiones durante la madrugada pero no pudo sobrevivir.

Un enfrentamiento a tiros entre un policía y motochorros en Wilde terminó con un desenlace trágico. Un niño de 10 años que había quedado en medio del tiroteo, recibió un disparo en el cuello y otro en la espalda. Fue trasladado de urgencia al hospital Presidente Perón donde terminó perdiendo la vida en la mañana de este jueves.

El hecho ocurrió en la noche del miércoles en la intersección de Caxaraville y Rondeau. El menor salía del club de futbol al que asistía junto a su madre. Justo en ese momento cuatro delincuentes a bordo de dos motos intentaron asaltar a un policía que se defendió a los tiros.

Bastian Escalante Montoya, de 10 años, recibió dos impactos de bala, uno en la cervical derecha y otro en el omoplato izquierdo. Aún no se sabe si los disparos que impactaron sobre el niño fueron ejecutados por los delincuentes o por el oficial que iba de civil.

El caso es investigado por el fiscal Ignacio Colazo, de la UFI Nº2 del Fuero de Responsabilidad Penal juvenil del Departamento Judicial de Lomas de Zamora. Los motochorros fueron detenidos y se los imputó por el delito de tentativa de homicidio calificado criminis causae y robo con armas. Respecto al policía no se tomó ninguna medida y se considera que actuó en legítima defensa.

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