Luego del discurso del Presidente en la apertura de las sesiones ordinarias, las empresas anunciaron nuevos incrementos para los consumidores.
Las petroleras establecieron este sábado 2 de marzo un nuevo aumento de los precios de la nafta y el gasoil, horas después del encendido discurso del presidente Javier Milei ante el Congreso. Estas subas, argumentan, son consecuencia del incremento en los impuestos a los combustibles (que impacta en casi 4%), la devaluación del peso contra el dólar (2% mensual) y el peso de los biocombustibles.
La suba de los combustibles llegará al 7,5% en promedio a nivel nacional. La nafta súper, que estaba $ 744 el litro, ahora llega a $ 800 en las estaciones de servicio de YPF de la Ciudad de Buenos Aires, el lugar más económico, con excepción de la Patagonia (donde no se paga el impuesto a los combustibles). La premium alcanza los $ 989 por litro.
En tanto, el diésel súper subió de $ 784 a $ 843 y en su versión premium pasó de costar $ 998 a $ 1.073, y superó la barrera de los mil pesos.
En enero, los precios de los combustibles subieron un 6,5% en promedio lo que, según el último informe de la Secretaría de Energía, llevó a una caída del consumo de naftas y gasoil del 5,76% respecto al mismo mes del año anterior.
Mientras la nafta de mayor calidad se desplomó y registró una caída del 22,67%. Por la diferencia de precios, las ventas en la red de estaciones de servicio de YPF escalaron 2,89%. En cambio, en las de la petrolera Shell retrocedieron 15,51%.