Una vecina de Isla Maciel, Marcela, denunció públicamente la dramática situación que atraviesa junto a su esposo, Miguel Ángel Mendoza, de 81 años, jubilado por PAMI y paciente con principios de Alzheimer y otras enfermedades.
Según relató, hace más de dos meses inició el trámite para recibir los pañales de adulto que su esposo necesita diariamente, pero hasta el momento no obtuvo ninguna respuesta. “Llamo al 138 y me dicen que el pedido está cargado. Cuando fui personalmente a PAMI en Avellaneda, me dijeron que no figuraba. Volví a iniciar el trámite el 2 de septiembre, pero aún no entregaron nada”, explicó.
Marcela asegura que, ante la falta de respuesta, debe comprar los pañales de manera particular, lo que representa un gasto mensual de más de 80.000 pesos, suma imposible de sostener para un matrimonio jubilado. “Mi marido necesita dos pañales por día. No podemos esperar hasta octubre como me dijeron en la empresa proveedora. Es un derecho básico que no pueden vulnerar”, sostuvo con indignación.
La vecina también denunció la falta de atención adecuada en las oficinas de PAMI, donde asegura que los afiliados son maltratados y deben peregrinar de un lugar a otro sin obtener soluciones. “Están vulnerando los derechos de los jubilados. A mi marido incluso le habían cortado los remedios por tres meses, y se descompensó. Tuve que pelear para que se los devuelvan. Es una vergüenza”, expresó.
El caso expone nuevamente las falencias del sistema de provisión de insumos médicos del PAMI y el calvario que deben atravesar miles de jubilados y sus familias para acceder a elementos esenciales para su salud.
👉 Este medio se comunicó con el titular de PAMI Avellaneda, Pascual Sanseverino, quien se comprometió a ocuparse personalmente del tema. En un mensaje de audio, la vecina confirmó la buena predisposición del funcionario y anunció que en los próximos días volverá a salir al aire para contar qué avances hubo en su caso.