El último informe oficial reveló que la inflación en Argentina alcanzó su nivel más bajo en cinco años. Sin embargo, aunque los indicadores macroeconómicos muestran una tendencia positiva, la realidad cotidiana de los comerciantes aún no refleja una recuperación.
Ariel, propietario de Celulares Las Torres, un comercio ubicado en avenida Camino General Belgrano 4330, Galerías Arriba del Camino, frente al barrio Santa Teresita, comparte su experiencia en este contexto económico. Su negocio se dedica a la venta y reparación de celulares, tablets y computadoras, y en el último año ha notado ciertos cambios en los precios y el consumo.
Hace casi un año que los insumos importados no han aumentado de precio, y eso es una buena noticia, comenta. En el rubro tecnológico, los costos suelen estar atados a la inflación y al valor del dólar, por lo que la estabilidad en los precios le ha permitido ofrecer mejores condiciones a sus clientes.
Sin embargo, las ventas han caído un veinte por ciento este mes, lo que confirma que el alivio económico aún no impacta en el consumo cotidiano. La gente no está comprando como antes. Se piensa mucho más cada gasto, y si pueden, prefieren reparar en lugar de cambiar el equipo, explica Ariel.
Con la proximidad del Día del Padre, el comerciante también observa cambios en las compras habituales de regalos. Los celulares siguen siendo una opción, pero también hay demanda de auriculares y relojes inteligentes. La mayoría busca regalos en el rango de veinte mil pesos para arriba, comenta.
Ariel y otros comerciantes de la zona esperan que la estabilidad económica se traduzca en una recuperación del consumo en los próximos meses, pero la realidad sigue mostrando que, aunque los números mejoran, el impacto en la vida cotidiana aún no es tan evidente.